A poco de las elecciones presidenciales, Lourdes Flores Nano es la candidata a quien las encuestas señalan con más posibilidades. Derechista, católica, poco vinculada con el feminismo, ha dicho, sin embargo, que quiere la paridad en el poder. El suyo es sólo uno de los tantos nombres femeninos que, últimamente, circulan por el escenario político de Perú: otras presidenciables, esposas de e hijas de, aparecen mientras “solterona” sigue siendo un insulto.
Por Sandra Chaher
Texto completo.