Hace algunos días, la Oficina de Comunicaciones del Ministerio de Salud convocó a una conferencia de prensa con muy poco éxito, pues la ausencia de periodistas fue notable y el rebote de la misma apenas se notó. La intención era mostrar que su negativa a aprobar el Protocolo Nacional de Aborto Terapéutico estaba respaldada por la ciudadanía. Pues 40,000 firmas no es poca cosa, pero sí lo es cuando se sabe que las mismas fueron recogidas en los colegios religiosos, como parte de la matrícula o en reuniones de padres de familia. No hay duda de que muchas personas fueron sorprendidas y de que los métodos no son extraños.