Aunque hace casi tres años el aborto en Colombia se despenalizó en tres casos particulares (por violación, cuando está en peligro la vida de la madre y por malformaciones del feto incompatibles con la existencia), autoridades de salud de ciudades como Bogotá siguen estimando que anualmente se practican cerca de 30.000 procedimientos de este tipo de manera clandestina. Reportes oficiales indican que solo en el 2008 146 mujeres perdieron la vida en la capital a causa de complicaciones derivadas de interrupciones del embarazo mal practicadas.