En Nicaragua, entre 1998 y 2008 se denunciaron más de 14.000 casos de violación. Dos tercios de las víctimas eran menores de 17 años. Las cifras de violación son aún más alarmantes si se tiene en cuenta que en Nicaragua la violación es un delito poco denunciado, especialmente cuando se comete contra niñas y los agresores son familiares de las propias víctimas.
La ausencia de programas gubernamentales para concientizar a funcionarios públicos sobre la violencia sexual significa que, a menudo, es a la víctima a quien se culpa, y no al agresor.
Algunas sobrevivientes sufren el trauma adicional al descubrir que se han quedado embarazadas a consecuencia de la violación y no se les proporciona ayuda ni para cuidar del bebé ni para regresar a sus estudios o su trabajo. La reciente prohibición total al aborto agrava aún más las consecuencias al no permitirles ni a víctimas ni a profesionales de la salud considerar esta alternativa, aún cuando se trate de una niña la vida de la madre está en riesgo.
Únase a esta campaña para exigir a las autoridades de Nicaragua que protejan a las niñas y las mujeres de la violencia sexual. El sábado 27 en el Andador Chapultepec a partir de 7.30 pm, las y los activistas de Amnistía Internacional estarán realizando un flashmob y una intervención visual para pedir al gobierno Nicaragüense que tome medidas efectivas para proteger a las niñas y mujeres. Si desea participar en la actividad puede comunicarlo a través de este enlace. Se recomienda asistir con un paraguas o ropa para clima fresco ya que existe riesgo moderado de lluvia.