Durante los últimos diez años la tasa de cesáreas en los establecimientos privados de salud ha aumentado en una forma que llama la atención. Mientras en el sector público estas operaciones se han practicado al 20% de las gestantes, como tendencia constante, en las clínicas privadas dicha proporción se ha elevado hasta el 50% y la tasa partos por cesárea sube a 70% si las pacientes cuentan con un seguro privado de salud.