“En México, el VIH ha podido contenerse debido a que la prevalencia de 0.3 por ciento ha podido mantenerse más baja que en toda América Latina, en este sentido los esfuerzos preventivos han sido exitosos, aunque son insuficientes, y se requiere una inyección de recursos económicos cuatro veces más de lo que se dispone para prevención en el ámbito nacional”, advirtió Carlos García de León, director de Prevención y Participación social del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH sida (Censida).