Roberto Piazza contó el año pasado en su libro Corte y Confesión que fue violado por su hermano Ricardo durante su niñez y adolescencia. El año pasado, Ramiro, su sobrino, le contó que su papá también lo abusaba a él. Desde principio de año que Ricardo está preso. Y esta semana la Justicia de Santa Fe le negó el pedido de anulación del juicio. El diseñador creó una fundación cuando descubrió el efecto dominó de alzar la voz y vencer el miedo para frenar los delitos sexuales cometidos –y repetidos– en el interior de las familias.