El presidente de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA), César Cigliutti, criticó severamente las expresiones del papa Benedicto XVI, quien dijo que el matrimonio entre personas del mismo sexo es una «amenaza» , y consideró «vergonzoso e indigno» tener que «judicializar» ese tipo de contrato civil. Esa organización GLBT le exigió a Ratzinger y a la Iglesia que «respeten las leyes civiles» y les enrostró los casos de abuso sexual callados por el Vaticano.