La temática de los derechos sexuales y reproductivos y el aborto han ganado la agenda pública y están en debate. Aunque incomode, aunque todavía existan intereses para dejarlo por fuera de los ámbitos institucionales, aunque se trate de subestimar o mostrar como ejemplo de las discusiones a eludir «porque nos dividen», la realidad es que ya están en debate y no se puede evitar. La sociedad lo viene discutiendo y están afianzadas por lo menos dos premisas básicas: el acuerdo mayoritario en contra de que las mujeres sean criminalizadas cuando se practican un aborto y la percepción de que el cambio de Ley es necesario e inminente.