“Nosotros no trabajamos con ángeles, sino con humanos, por eso pensamos que muchas veces la abstinencia se rompe más frecuentemente que el condón”, mencionó Lisandro Orlov, pastor de la Iglesia Evangélica Luterana Unida de Argentina, al explicar las causas por las cuales las propuestas de ciertas agrupaciones religiosas no son factibles en la lucha contra el VIH/sida.