Ellas fueron a buscar trabajo fuera de sus comunidades, pero ya no regresaron a sus casas. Sus familias creen que se casaron o que por falta de dinero no pudieron volver.
Son las víctimas de trata de personas en el estado de Chihuahua que permanecen en el olvido, mientras el delito se expande y se mantiene impune ante la indolencia de las autoridades judiciales.
Por ello, organizaciones civiles de mujeres han demandado a la Fiscalía General del estado que convoque a habitantes de pueblos y ranchos, principalmente de la zona serrana, para que pregunten por el paradero de sus familiares mujeres que se hayan ido en busca de trabajo a otra ciudad y que no han sabido de ellas.