María Edis se golpeó el vientre tres días antes de abortar. Del quirófano pasó a las bartolinas, de las bartolinas a la cárcel y de la cárcel a la tumba. Tenía 31 años. Cristina tenía 18 años cuando perdió a su segundo hijo y fue castigada con 30 años de prisión. Una revisión de su caso determinó que los jueces se excedieron y quedó libre cuando ya había estado presa más tiempo que el que ameritaba”.