En la provincia de Santa Fe se puso en marcha un registro de objetores de conciencia en relación con las prácticas ligadas a la salud sexual y reproductiva que ya tiene sus primeros resultados: hubo 277 personas que manifestaron su negativa a realizar abortos no punibles, ligaduras tubarias, vasectomías o a prescribir anticoncepción de emergencia, entre ellos todos los profesionales de un mismo servicio de ginecología. Estos datos, que estarán disponibles y visibles tanto en centros de salud como en Internet, aseguran que todos y todas puedan elegir con quién tratarse y con quién no.