CLAM – Centro Latino-Americano em Sexualidade e Direitos Humanos

Das intervenções às transformações

La respuesta, contundente e inmediata, ante las declaraciones del Presidente de Bolivia, Evo Morales, en la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y la Madre Tierra –acerca de presuntas “desviaciones en su ser como hombres” que los varones sufrirían al ser expuestos a alimentos modificados artificialmente– muestra el grado de organización y visibilidad del Colectivo TLGB de Bolivia, convergencia de organizaciones de todo el país que, recogiendo una historia de 10 años de activismo, desde 2007 participan del proceso actual de refundación nacional.

Más allá del sentido y contexto de las afirmaciones del líder popular y de la reacción suscitada internacionalmente, resulta interesante centrar la atención en el lugar singular que la no discriminación por género y orientación sexual ocupa en el escenario político e institucional boliviano y en la historia reciente de las organizaciones TLGB en Bolivia, cuyas voces se hicieron visibles para el resto del mundo a raíz del incidente. A través de un <> dirigido a Evo Morales firmado por el Colectivo TLGB de Bolivia, 38 grupos y 6 activistas independientes le manifestaron al presidente su malestar por estos comentarios, recordándole que la discriminación por orientación sexual e identidad de género violaba un principio fundamental de la Nueva Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia (NCPE).

En los últimos años Bolivia ha experimentado notables avances en el reconocimiento de la orientación sexual y la identidad de género como objeto de protección legal, entre los cuales la Nueva Constitución, junto con su par ecuatoriano, constituye un hito fundamental a nivel continental. Las organizaciones TLGB de Bolivia han desempeñado un papel fundamental en estas transformaciones y resulta clave analizar el proceso por el cual se han tornado protagonistas de esos cambios.

El Colectivo TLGB de Bolivia es una organización de organizaciones que en la actualidad reúne a varios grupos de base. El Colectivo nació en 2007 tras varios intentos de canalizar las fuerzas del activismo de travestis, transexuales, transgéneros, transformistas, lesbianas, gays y bisexuales del país, que hasta ese momento actuaban separadamente. Según relata Willmer Galarza, presidente del Colectivo, la articulación de estos grupos se dio en el marco del V Congreso Nacional de las Diversidad Sexuales y Genéricas de Bolivia , en el que se retomaron experiencias organizativas previas, se planificaron estrategias de visibilización del movimiento y se formularon acciones de fortalecimiento de los grupos participantes; lo que contribuyó a consolidar el activismo por la orientación sexual y la identidad de género en el país.

En su artículo Gay Organizations, NGOs, and the Globalization of Sexual Identity: The Case of Bolivia (The Journal of Latin American Anthropology 5 (2): 89-111, 2000) Timothy Wright señala que en los primeros años de la década de 1990, la conformación de las primeras organizaciones y su identificación en torno a la categoría gay se dio merced a las intervenciones del gobierno boliviano y de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional – USAID, en el marco del Proyecto Contra el Sida – PCS. En 1994, el Ministerio de Salud y el PCS crearon un Centro Comunitario Gay, como estrategia para brindar servicios de información y prevención del VIH/SIDA a la población que esa política de estado englobaba como de “hombres que tienen sexo con hombres” (HSH). Según Wright, profesional de la salud designado por USAID para el diseño e implementación de estrategias de prevención contra el VIH/SIDA dirigidas a HSH en Bolivia, esta “producción de hombres gay” tuvo escasos resultados debido a factores relacionados con la identidad de género y con las características socioeconómicas de los “hombres de ambiente” bolivianos.

La promoción de la identidad gay llevada a cabo por el PCS, señala Wright, fue tomada por la gente “de ambiente” como un asunto burocrático en lugar de algo relacionado con las luchas de liberación homosexual. No obstante, en la actualidad “gay” es una categoría de autoidentificación en torno a la cual se movilizan muchas personas en Bolivia. En los años siguientes, el PCS se convirtió en cuna de grupos activistas cuyas agendas fueron inicialmente definidas en torno a la lucha contra el VIH/SIDA. Como señala el informe Derechos Humanos de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (LGBT) en Bolivia, elaborado en 2008 por la Fundación Igualdad LGBT, posteriormente las organizaciones se separaron del PCS y empezaron a considerar otros horizontes de acción como la lucha por los derechos de las personas TLGB.

Con la subsiguiente conformación de la Red Nacional de Comunidades Gays, Lésbicas, Bisexuales, Travestis, Transgéneros y Transexuales de Bolivia y luego del Colectivo TLGB de Bolivia, las organizaciones y activistas bolivianos se volcaron a actividades de incidencia en escenarios políticos como la Cumbre Social por la Integración de los Pueblos y la Asamblea Nacional Constituyente, participando también en la formulación de propuestas gubernamentales como el Plan Nacional de Acción de Derechos Humanos “Bolivia Para Vivir Bien 2009-2013”.

En entrevista con el CLAM, Willmer Galarza nos habla sobre los principales logros y perspectivas de trabajo de este colectivo.

¿Cómo evalúa el proceso de inclusión de la “orientación sexual” y la “identidad de género” como categorías protegidas contra la discriminación en la Nueva Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia (NCPE)?

Sin la consolidación de la actual organización del Colectivo TLGB a nivel nacional no hubiera sido posible conseguir que nuestra Nueva Constitución Política del Estado Plurinacional (NCPE) contemplara el artículo 14 que busca reconocernos una ciudadanía plena y que, de manera escrita, nos pone en un lugar privilegiado a nivel mundial. Ser reconocidos en la NCPE nos ha permitido formular una nueva agenda política y reivindicativa, ya que el Estado Plurinacional de Bolivia debe responder de manera efectiva a todos los ciudadanos sin discriminación. Sin embargo, las temáticas de la orientación sexual y la identidad de género con frecuencia son excluidas de escenarios legales imprescindibles, por lo que debemos hacer incidencia política en diferentes ámbitos.

La agenda de la Asamblea Plurinacional, antiguo Parlamento, tiene una larga lista de leyes a reformar y a crear para que se adapten a la NCPE, por tanto, como Colectivo debemos trabajar para que se vaya incluyendo en esta agenda y en otros escenarios las temáticas propias de las poblaciones TLGB.

Desde sus inicios, las organizaciones TLGB bolivianas se han articulado en torno a la lucha contra la propagación del VIH/SIDA. ¿Qué ha significado esto para el movimiento?

La historia del movimiento homosexual boliviano nos remite específicamente a la epidemia del SIDA como inicio de las organizaciones más importantes del país. A diferencia de estas organizaciones, para el Colectivo TLGB de Bolivia la epidemia del SIDA no es el único tema aunque reconocemos su importancia. De hecho, tras una lucha de dos años logramos que el Colectivo TLGB de Bolivia sea parte orgánica y avalada por estatutos del Mecanismo de Coordinación de País del Fondo Mundial de lucha contra el Sida, la Malaria y la Tuberculosis. Ahora somos el principal vocero de las personas TLGB de Bolivia en esa importante instancia de decisión.

El Colectivo TLGB de Bolivia también ha participado en la elaboración del Plan Estratégico del Programa Nacional ITS/VIH/SIDA del Ministerio de Salud y Deportes de Bolivia, en la revisión del informe de la UNGASS (Sesión Extraordinaria de la Asamblea General de las Naciones Unidas, por sus siglas en inglés) y otros espacios a los cuales somos convocados como entidad representativa y legítima de la sociedad civil.

El tema del VIH/SIDA es una parte de nuestro trabajo, pero la parte más importante es la política, que nos permite destacarnos en diferentes instancias. Ya participamos en la Asamblea Constituyente, ahora hay otros espacios donde tenemos aliados muy importantes como la Asamblea Plurinacional, además de las instancias locales con las que ya hemos trabajado a través de las organizaciones de base en cada ciudad. El Presidente del Colectivo TLGB de Oruro es Concejal suplente del Municipio de Oruro y un miembro del Directorio del Colectivo TLGB de Oruro es Asambleísta suplente para la redacción del Estatuto Autonómico de ese Departamento. Como una estrategia para hacer incidencia política desde adentro, el Presidente del Colectivo Nacional trabaja a distancia con el Concejal y el Asambleísta.

¿Cómo ha sido la incidencia del Colectivo TLGB en escenarios de toma de decisiones, como el de la redacción de la NCPE y el del diseño del Plan de Acción de Derechos Humanos?

Desde el año 2002 se han llevado a cabo distintas acciones al interior de las poblaciones TLGB de Bolivia, con el fin de identificar sus principales necesidades y demandas. Durante un tiempo algunas organizaciones formularon propuestas para atender estas necesidades y demandas en nombre de la comunidad GLBT; sin embargo, estas propuestas se quedaron “durmiendo el sueño de los justos”.

Fue hasta el año 2006 que dos agrupaciones de base social GLBT, una de Sucre –Diversencia– y otra de Cochabamba –Comité DSG–, promovieron una acción directa en la “Cumbre Social por la Integración de los Pueblos” a la que asistieron más de 100 activistas TLGB de Bolivia. Este fue un hito importante en la historia del Colectivo, ya que fue la primera vez que las organizaciones TLGB trabajaron coordinadamente bajo una estrategia de incidencia política claramente comprendida por todos los asistentes. Esto permitió incluir la temática de orientaciones sexuales e identidades de género en 5 de las 10 mesas de trabajo de la Cumbre, incluso en la Mesa de Militarización y Defensa.

A raíz de este hecho histórico las organizaciones que lideraron la asistencia a la Cumbre del 2006 convocaron para el 2007 el V Congreso de Diversidades Sexuales y Genéricas de Bolivia, que se venía realizando desde hacía 10 años. Este Congreso logró reunir a casi 100 personas representativas de grupos y también activistas independientes. En este evento las organizaciones se plantearon la necesidad de tener incidencia en la redacción del texto Constitucional que estaba construyéndose en la Asamblea Constituyente, y para ello delegaron su representación al Colectivo TLGB de Bolivia que, a partir de allí, concretó las propuestas desde su brazo en la ciudad de Sucre, sede de la Asamblea Constituyente.

El Colectivo TLGB de Bolivia fue consultado, aunque con retraso, para la formulación del Plan de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia. No obstante, el presidente del Colectivo intervino a tiempo ante el Ministerio de Justicia para coordinar nuestra participación y de esta manera legitimar un trabajo que, sin nuestra intervención, habría sido parcializado y no hubiera tenido el apoyo que en su momento tuvo.

Actualmente el Plan debe desarrollarse a partir de la participación del Colectivo como actor principal y para ello se creó una Comisión Política con sede en la ciudad de la Paz, encargada de las acciones necesarias para hacer efectiva la presencia de las diversidades sexuales y genéricas dentro de las nuevas leyes del país.

¿De qué modo la refundación de Bolivia como Estado Plurinacional Comunitario ha contribuido a transformar la relación de los colectivos TLGB con el Estado y con otros movimientos y colectivos sociales?

La refundación de nuestro país ha sido algo que no ha sido digerido todavía, ya que supone la aparición de un nuevo paradigma estatal de un día para otro. De República nos transformamos en un Estado Plurinacional, pero ¿qué es eso? Estuvimos indagando y no encontramos otras referencias a esto, es algo nuevo. Por eso debemos ser cautos y desarrollar poco a poco la capacidad de adaptarnos a la nueva realidad. Somos un Estado en construcción y debemos enfrentar obstáculos que nunca antes se nos habían presentado.

Para un colectivo social como el TLGB, esta es una oportunidad de estructurar su organización de una forma diferente. Sin embargo existe la amenaza de que las estructuras instaladas se anquilosen y no se entienda el cambio de visión. Por esta razón es un reto que en los próximos años el Colectivo TLGB de Bolivia se fortalezca a partir de una nueva forma de mirar tanto al Estado como a sí mismo, pues considero que para que una organización pueda trabajar a nivel nacional y tener impacto a nivel estatal debe ser una pequeña imagen de lo que es el Estado.

En otras palabras, la estructura del Colectivo debe responder a la nueva estructura estatal, pues cada uno de los 9 departamentos del país ya son Autónomos y están construyendo sus autonomías con base en Asambleas Autonómicas, lo que obliga a que en cada uno de los departamentos se creen o fortalezcan organizaciones similares al Colectivo Nacional, capaces de aglomerar a todos los grupos, familias, cofradías y organizaciones TLGB del departamento, para representarlas a través de un directorio democráticamente elegido que esté a cargo de la coordinación del Colectivo Nacional.

El artículo 2 de la NCPE otorga libre determinación, autonomía y autogobierno a las naciones y pueblos indígenas y campesinos, así como el reconocimiento de sus propias instituciones y entidades territoriales. ¿Cómo son las relaciones de las citadas naciones y pueblos con las personas TLGB que habitan estos territorios?

La estructuración de las autonomías en Bolivia representa a la vez un reto y una oportunidad. Es un reto porque allí se pueden crear espacios de resistencia a nuestras reivindicaciones. Es una oportunidad para incidir en espacios a los que antes no podíamos acceder. Sin embargo, a pesar de las amenazas que puedan haber, tenemos a nuestro favor el Artículo 14 que sanciona y prohíbe todo tipo de discriminación basada en orientación sexual e identidad de género, junto a otras formas de discriminación.

¿Cómo se ha dado el proceso de organización en los diferentes departamentos y municipios?

Ya existen ejemplos concretos que permiten ver que este modelo de organización es el más efectivo. La Paz ha fundado la Federación de Colectivos TLGB de La Paz; que congrega a dos instancias: La Asociación de Colectivos TLGB El Alto y la Federación La Paz. Estas dos organizaciones se han aliado para conformar una organización mayor para dirigir su accionar hacia objetivos comunes. Esta nueva instancia coordina sus acciones directamente con el Colectivo TLGB de Bolivia. Otro ejemplo interesante es el Comité DSG de Cochabamba, que es la instancia organizativa más antigua con estas características, que reúne a todas las organizaciones, grupos y familias TLGB del Departamento de Cochabamba. Esta es la instancia de ese departamento que coordina con el Colectivo TLGB de Bolivia.

Otro ejemplo que está en proceso de consolidación es el Colectivo TLGB de Oruro, que también recoge a varios grupos de esa ciudad y coordina acciones con el Colectivo TLGB de Bolivia.

Todos ellos están involucrados en los procesos autonómicos del departamento y de sus municipios. Sin embargo somos concientes de la importancia de no forzar la inclusión de modelos que tal vez sirvan en alguna región pero en otra puedan no funcionar. Por ejemplo, la Federación de la Paz, integrada por más o menos 18 grupos, se alió con la Asociación de El Alto, que tiene otro tanto de grupos afiliados, lo que hace que la Federación del Departamento de La Paz cuente con 36 grupos y organizaciones inscritas. Pero este modelo de organización no puede funcionar en los departamentos de Beni o Tarija, donde la cantidad de población no permitiría una integración así.

Como se ve estamos ante un momento de construcción y ese es el reto que debemos responder ahora. Hasta el momento la imagen del Colectivo TLGB de Bolivia, luego de sus 2 años de fundación, es firme. El Colectivo actúa en varios niveles de poder, tiene legitimidad, credibilidad y es referente a nivel nacional de las poblaciones TLGB de Bolivia. Ahora debemos crecer acorde con la realidad del país, que es el reto para el nuevo Directorio que será electo en los meses próximos.