El Ministro de Salud Chileno, Dr. Jaime Mañalich Muxi, realizó a espaldas de la ciudadanía y el Congreso Nacional, por medio de un Decreto un cambio sustantivo a la Ley N°19.779 – Ley de SIDA – derrogando uno de los derechos fundamentales garantizados en esta ley, como es la voluntariedad del test de Elisa, estableciendo con esta modificación la obligatoriedad solo a las mujeres embarazadas. Agravando aun más la situación, establece políticas de corte policial para la pesquisa del VIH. De este modo, abandona su responsabilidad en torno a la promoción de la salud y la prevención del VIH utilizando los recursos para ello asignados en el presupuesto de la nación, cambiando el uso de estos recursos en una campaña destinada a la promoción del test para VIH, estrategia ampliamente reconocida como poco eficaz para detener esta epidemia.