Como parte de las actividades de la Internacional Association for the Study of Sexuality, Culture and Society – IASSCS, del 2 al 13 de julio tuvo lugar en Lima, Perú, el curso de capacitación “Investigación Social en Sexualidad”, coordinado por Carlos Cáceres, de la Universidad Cayetano Heredia, Presidente de la IASSCS, y Maria Luiza Heilborn, del CLAM/IMS-UERJ, Vicepresidenta de la asociación, con el apoyo de Horacio Sívori, también del CLAM. El curso reunió a un grupo destacado de especialistas que tuvieron a su cargo el dictado de las sesiones didácticas.
Participaron del curso 20 jóvenes investigadores latinoamericanos, becados con apoyo de la Fundación Ford para participar del curso y exponer sus trabajos en la conferencia internacional de la IASSCS. Con la contribución de docentes de diversas instituciones y nacionalidades, se logró un abordaje de cuestiones cruciales de la sexualidad en diversos contextos culturales, con énfasis en las sociedades latinoamericanas.
Maria Luiza Heilborn, responsable por el diseño del curso, y Horacio Sívori explican los objetivos y dinámica del curso y su relevancia para la formación de investigadores en temas referentes a sexualidad en América Latina.
¿Cuál fue el principal objetivo del curso?
Maria Luiza Heilborn – El objetivo del curso fue familiarizar a los alumnos con los desarrollos recientes de las teorías socio antropológicas de la sexualidad. Propusimos analizar la esfera del ejercicio y de los deseos sexuales en su relación con el tema de la corporalidad y de marcadores de clasificación social, tales como el género, la generación. Por otra parte, el curso ofreció entrenamiento en enfoques y técnicas cualitativas de investigación sobre el tema.
La contribución de docentes de diversas instituciones y nacionalidades permitió un abordaje de las cuestiones tomando en consideración diversos contextos culturales, con énfasis particular en las sociedades latinoamericanas. La idea fue que las y los participantes se capacitaran para traducir observaciones acerca de prácticas, valores y convenciones relativas a la sexualidad al diseño de una investigación de campo.
¿Quiénes estuvieron a cargo del dictado?
Heilborn – Aparte del equipo coordinador, el curso contó con la contribución de importantes investigadores del área radicados en la región que habían sido congregados en Lima para la conferencia internacional de la IASSCS: Mario Pecheny, de Argentina, Maria Filomena Gregori, Veriano Terto y Adriana Vianna, del Brasil, Jaime Barrientos, de Chile, y Ximena Salazar, del Perú. A ellos se sumaron, como conferencistas especiales, Alain Giami, de Francia, y Sean Slavin y Murray Couch de Australia.
¿Cuál fue el contenido de las clases?
Heilborn – Las clases versaron, por un lado, sobre los principales debates teóricos y las disputas políticas contemporáneas en torno de la sexualidad y el género. Por otro lado, fueron examinados algunos objetos clave de investigación y reflexión en el campo de la sexualidad: salud sexual y reproductiva, prácticas e identidades sexuales, movilización social en torno de la sexualidad, derechos sexuales. Paralelamente, fueron abordados los fundamentos teóricos y metodológicos que actualmente orientan la investigación social en sexualidad, en sus vertientes cualitativas y cuantitativas. Al presentar casos concretos de investigaciones desarrolladas en la región, examinando aspectos técnicos de las prácticas de investigación e intervención en el campo de la sexualidad en la perspectiva de las ciencias sociales, pretendimos generar también una reflexión acerca de las cuestiones éticas involucradas.
¿Se pretendió capacitar en los temas de sexualidad o más bien desarrollar habilidades para una mejor investigación?
Sívori – Si bien el curso tuvo un fuerte componente expositivo, este en gran medida fue orientado a discutir experiencias concretas de investigación, a modo de disparador de reflexiones. De hecho las reuniones fueron muy animadas y las alumnas y alumnos participaron activamente con preguntas y comentarios.
Por otra parte, los participantes desarrollaron un ejercicio de reformulación de un diseño de investigación, con la idea de que contemplase las relaciones constitutivas de un objeto en el campo de la sexualidad como hecho social, operando un recorte empírico y seleccionando los procedimientos de campo apropiados. Para ello ideamos un dispositivo de tutorías individuales “a distancia” a cargo de especialistas ligados a la red del CLAM en la región. A la vez, los avances fueron discutidos en grupos de trabajo junto con colegas del curso, coordinados por un(a) miembro del equipo docente. Con base en esos comentarios y en la discusión en los grupos de trabajo, coordinados en Lima por docentes del curso, los participantes procedieron a reformular sus proyectos de investigación. Estos luego fueron presentados en una plenaria desarrollada como actividad final del curso. En ella los alumnos expresaron su unánime satisfacción por los resultados.
Si bien formalmente no se prevé el seguimiento de los proyectos luego de finalizado el curso, esperamos que el contacto establecido entre docentes y participantes continúe, generando nuevas oportunidades de intercambio en el futuro.
Los participantes de este curso trabajaron sus investigaciones con ustedes. ¿Cuáles fueron algunas de ellas?
Sívori – Los proyectos se refieren al ejercicio de la sexualidad, en temas como la prostitución, la conyugalidad, las identidades y culturas sexuales, la sexualidad de personas con discapacidades o dolencias crónicas. Resulta interesante que la gran mayoría –si no todos– los proyectos abordan las tensiones que surgen entre visiones normativas y las experiencias, valores y representaciones sociales acerca de esos temas. Así, tanto al observar prácticas sociales o documentar los debates acerca de objetos como el trabajo sexual o la transgeneridad, las y los investigadores deben lidiar no sólo con lo que rápidamente se “lee” como “discurso” acerca de los mismos, sino que deben abordar los modos como los cuerpos se ven comprometidos en esas prácticas y se tornan foco de biopolíticas, de disputas sociales y de formación de identidades colectivas. El curso se tornó un estimulante espacio para discutir esas cuestiones.
Finalmente, ¿qué espera el CLAM de esta experiencia y cuáles son sus planes futuros?
Sívori – Tanto los encargados de organizar y coordinar el curso desde el CLAM, como nuestros colegas de la Universidad Peruana Cayetano Heredia quedamos muy satisfechos con esta experiencia. Fue un inmenso desafío desde el punto de vista de la organización, por tratarse de una colaboración “a distancia” entre dos países. No obstante, como señaló nuestro colega Carlos Cáceres, que brindó el apoyo institucional de la UPCH, “ese desafío es también una fortaleza”, ya que significa la oportunidad de consolidar nuestros lazos y diseminar nuestro trabajo más allá de fronteras tanto nacionales como disciplinarias. Esperamos, en un futuro no muy distante, poder replicar esta experiencia, incorporando los aprendizajes adquiridos desde el punto de vista de la organización.